Las personas suelen buscar el asesoramiento de un abogado especializado en casos de muerte por negligencia cuando sienten que la muerte de un ser querido podría haberse evitado si no hubiera sido por la negligencia de otra persona o entidad. Es bastante difícil afrontar la pérdida de un ser querido, pero imaginar que podría haberse evitado fácilmente puede hacer que el proceso sea mucho más difícil. Al mismo tiempo, un cónyuge o familiar sobreviviente puede tener que hacer frente a facturas médicas, gastos funerarios y la pérdida de apoyo financiero, lo que suma más problemas a su dolor.

¿Cómo puede ayudar un abogado de Salt Lake City especializado en casos de muerte por negligencia?

Si encontramos pruebas de que la muerte de su ser querido fue causada por negligencia, podemos presentar una demanda por muerte por negligencia contra la parte negligente. Si bien las demandas por muerte por negligencia pueden incluir actos o delitos intencionales, es esencial comprender que son distintas de los procedimientos penales, como los juicios por asesinato u homicidio involuntario. A diferencia de los tribunales penales, las demandas por muerte por negligencia no tienen como objetivo castigar al acusado (aunque el acusado puede considerar la sentencia como un castigo). En cambio, su objetivo principal es buscar una compensación financiera del acusado o, en muchos casos, de la compañía de seguros del acusado. Al presentar una acción civil, estas demandas brindan un recurso a las partes afectadas en lugar de imponer sanciones penales.

Además, a menudo se necesitan demandas civiles para ayudar a los familiares sobrevivientes a pagar los gastos finales y las facturas médicas restantes. Si la persona fallecida era el principal sostén de la familia, su cónyuge e hijos también pueden necesitar una compensación para los gastos de vida normales. Nadie debería tener que preocuparse por pagar el alquiler o poner comida en la mesa mientras atraviesa el proceso de duelo.

¿Quién puede presentar una demanda por muerte por negligencia en Utah?

Según la ley de Utah, los herederos del difunto o el representante personal de su patrimonio (a veces llamado albacea) pueden presentar una demanda por muerte por negligencia. Las personas que se consideran “herederos” incluyen:

  • El cónyuge del difunto
  • Los hijos del difunto
  • Los padres sobrevivientes del difunto
  • Los hijastros menores que dependían económicamente del difunto
  • Los miembros de la familia extendida, si ninguno de los anteriores sobrevivió al difunto
  • Los tribunales darán prioridad al cónyuge o pareja de hecho y a los hijos del difunto.

¿Cuánto tiempo tiene para presentar una demanda por muerte por negligencia?

En la mayoría de los casos, tiene dos años a partir de la fecha de la muerte para presentar una demanda por muerte por negligencia en Utah. En algunas situaciones inusuales, es posible que le concedan más tiempo, pero le recomendamos que hable con un abogado especializado en lesiones personales en Salt Lake City lo antes posible. Su abogado necesitará tiempo para investigar la muerte y reunir pruebas para respaldar su demanda.

¿Cómo saber si una muerte es por negligencia?

Esta es una pregunta difícil de responder por su cuenta mientras está de duelo por la muerte de un ser querido. Un abogado especializado en muerte por negligencia puede ayudarlo a analizar los hechos del caso para determinar si alguno de los involucrados fue negligente. Hay tres principios necesarios para demostrar la negligencia:

El demandado tenía el deber de cuidar al fallecido

El hecho de que esto sea cierto o no depende de la causa particular de la muerte. Si se trató de un accidente automovilístico, generalmente podemos asumir que todos los conductores en la carretera tienen el deber de conducir con cuidado y hacer un esfuerzo razonable para evitar colisiones. Si se trató de una mala praxis médica, el médico o proveedor de atención médica tiene el deber de actuar de conformidad con los estándares de su especialidad. Su abogado puede explicarle el deber de cuidado aplicable en el caso de su ser querido.

El acusado tomó medidas que constituyeron un incumplimiento de este deber de cuidado

Necesitaremos proporcionar pruebas para demostrar exactamente cómo el acusado incumplió su deber de cuidado. Por ejemplo, otro conductor provocó una colisión frontal fatal al conducir en estado de ebriedad, cruzar la línea central y chocar el automóvil del fallecido. Esto puede parecer algo simple de probar, pero en un caso de muerte por negligencia, requerirá un análisis cuidadoso de las pruebas, como las declaraciones de los testigos, el video (si está disponible), los datos de la caja negra (la mayoría de los automóviles modernos tienen grabadoras de datos de eventos o EDR) y cualquier registro que hable sobre la intoxicación del acusado (citaciones, registros de arrestos, resultados del nivel de alcohol en sangre).

Estas acciones causaron directamente las lesiones y la muerte del difunto

No importa cuán negligente haya sido el acusado si no puede probar que esta negligencia causó directamente la muerte. En otras palabras, la lesión o lesiones fatales no habrían ocurrido si no fuera por las decisiones del acusado. Por ejemplo, una lesión cerebral traumática fatal no habría ocurrido si el acusado no hubiera cruzado la línea central y chocado con el auto del difunto. Su abogado usará registros médicos, testimonio de expertos y otros tipos de evidencia para demostrar cómo el incumplimiento del deber de cuidado causó la muerte en cuestión.

¿Qué pasa si el acusado ya fue juzgado en un tribunal penal?

Como comentamos anteriormente, los tribunales penales y civiles son dos sistemas separados. Un acusado que pierde en un tribunal penal podría perder su libertad o ir a prisión (aunque en algunos casos, puede ser sentenciado a libertad condicional en su lugar). Un acusado que pierde en un tribunal civil podría perder dinero, o su compañía de seguros podría pagar la sentencia, según la situación.

Si el acusado ya fue juzgado en un tribunal penal, puede proceder con un caso civil en su contra independientemente de lo que haya sucedido. Incluso si fue declarado inocente en un tribunal penal, aún puede presentar una demanda por muerte por negligencia en un tribunal civil porque la carga de la prueba es mucho menor. En un caso penal, se le ordena al jurado que decida si el acusado es culpable “más allá de toda duda razonable” basándose en la evidencia presentada en un juicio. En un caso civil, se le ordena al jurado que decida si es más probable que el acusado sea culpable que no basándose en una “preponderancia de la evidencia”.

Por supuesto, no perjudica su caso si el acusado ya fue declarado culpable en un tribunal penal, pero una absolución tampoco perjudica necesariamente su caso debido a la menor carga de la prueba en un juicio civil.

¿Eso significa que debe ir a juicio?

No. Hemos descrito cómo funciona el proceso en un caso judicial porque siempre debemos tener en cuenta esos estándares en una demanda por muerte por negligencia. Sin embargo, la realidad es que la mayoría de las demandas por muerte por negligencia se resuelven fuera de los tribunales. Podemos comenzar el caso presentando una demanda y asistiendo a audiencias previas al juicio en el tribunal local, pero generalmente podemos negociar un acuerdo con la otra parte o su compañía de seguros antes de ir a juicio. Esto es preferible en la mayoría de los casos porque les ahorra a los miembros de la familia una experiencia larga y estresante. Sin embargo, ocasionalmente hay situaciones en las que el acusado o su compañía de seguros simplemente no llegan a un acuerdo razonable y, si eso sucede, estamos preparados para defender su caso en los tribunales.

Es importante entender que todos los estándares que hemos discutido siguen siendo relevantes cuando negociamos un acuerdo. La voluntad de la otra parte de llegar a un acuerdo justo está muy influenciada por cómo percibe sus probabilidades de ganar o perder en un caso judicial.

¿Cuánto vale una demanda por muerte por negligencia?

No podemos calcular el valor de su demanda sin conocer los detalles de su caso. Uno de nuestros primeros pasos será calcular todos los daños, que pueden ser económicos o no económicos. Estos incluyen:

  • Costos de un funeral o entierro.
  • Facturas médicas generadas por el tratamiento de las lesiones o enfermedades finales del difunto.
  • Pérdida de ingresos o apoyo financiero. Si el difunto proporcionó parte o la totalidad del apoyo financiero a su familia, estimaremos cuánto habría ganado probablemente si hubiera vivido.
  • Dolor y sufrimiento para usted y otros miembros de la familia. Esto incluye la pérdida del consorcio, la compañía, el apoyo emocional y otros beneficios de una relación.
  • Daños punitivos. Estos no se otorgan en todos los casos, pero si las acciones del acusado fueron particularmente extremas o aborrecibles, el jurado puede otorgar daños “punitivos” no por ninguna pérdida en particular, sino para castigar aún más al acusado.

En algunos casos, podemos intentar recuperar sus daños directamente de una compañía de seguros si existe una póliza pertinente. Por ejemplo, la mayoría de las reclamaciones por accidentes automovilísticos son pagadas por el seguro de responsabilidad civil del conductor culpable. En algunos otros tipos de muertes por negligencia, como delitos, puede que no exista una póliza de seguro pertinente. Aún puede demandar a la parte responsable, pero primero consideraremos la situación financiera del acusado. Si tiene pocos o ningún activo y no puede pagar la sentencia de manera realista, puede que no valga la pena el tiempo, los gastos y el estrés de presentar una reclamación.

¿Tiene un caso de muerte por negligencia? Llame hoy mismo a nuestro bufete de abogados especializado en muerte por negligencia en Salt Lake City

Ya sea que esté convencido de que la muerte de su ser querido se pudo haber evitado o se pregunte si podría haber sido así, la mejor manera de obtener respuestas es hablar con un abogado especializado en muerte por negligencia. Comuníquese con Valley Law Accident and Injury Lawyers para obtener una consulta gratuita sobre este asunto. Su llamada es confidencial y no hay obligación de hacerlo. Escucharemos su historia, responderemos sus preguntas y le explicaremos sus opciones para reclamar daños y perjuicios. Llámenos hoy al 801-810-9999.

 

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